No comenzó nada bien el partido para Andrey Rublev el partido en el Estadio Manolo Santana. Auger-Aliassime le rompió el servicio en la apertura y rápidamente se colocó 4-1 por encima. Más allá del marcador, resultó preocupante la excesiva inestabilidad con la que arrancó el ruso, que cometió tres dobles faltas en sus dos primeros juegos al saque.

De forma similar al día en el que eliminó a Alcaraz, el número 8 del ranking ATP fue mejorando sus prestaciones con el paso de la contienda y, mediada la primera manga, finalmente logró meter presión al canadiense, que aprovechó la renta para cerrar el acto inicial con un 6-4.

A partir de ese momento las fuerzas se equilibraron. Ninguno de los protagonistas concedió oportunidades claras con su servicio. Sin embargo, Rublev consiguió desestabilizar al norteamericano en las postrimerías del segundo set y llevó la definición de la final del Mutua Madrid open a la tercera escena por medio de un 7-5.

Pecó demasiado el canadiense de intentar castigar el revés del ruso, que devolvió la gran mayoría de golpes de forma brillante. No supo salir Auger-Aliassime de esa obcecación que le terminó impidiendo bajar el telón y llevarse su primer trofeo en la capital de España por la vía rápida.

Igual que su predecesor, el tercer set fue una verdadera batalla sin cuartel en la que ninguno de los contendientes flaqueó con el servicio. El desenlace, el mismo: Andrey Rublev supo dar un paso al frente en el momento preciso para ganar 7-5 y coronarse en el Masters 1000 madrileño con una remontada de mucho valor.

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