Sara Sorribes y Cristina Bucsa se enfrentaron el pasado 7 de abril en Bogotá, un partido que ganó la segunda junto a Kamilla Rakhimova. Para el Mutua Madrid Open, sin embargo, optaron por unirse con la esperanza de dar un salto cualitativo en dobles -ambas actúan también en la modalidad individual-. Y la decisión ha sido acertadísima, como demuestra el hecho de estar a un paso de incluir sus nombres en los libros de historia, ya que ningún dúo íntegramente español ha ganado el título.

Hace prácticamente una década, en 2014 y 2015, las exjugadoras Garbiñe Muguruza y Carla Suárez fueron capaces de lograr plaza en el duelo por la gloria, aunque sucumbieron en ambas ocasiones. La checa Barbora Krejcikova y la alemana Laura Siegemund, quienes sellaron su unión a comienzos de año, serán las encargadas de frustrar también a la castellonense y a la moldava -de fuertes raíces cántabras-.

Las brasileñas Beatriz Haddad Maia y Gamarra Martins fueron sus primeras víctimas en un igualadísimo y vibrante pulso (6-4, 1-6 y 10-8). Luego, ya en la ronda de octavos, Hao-Ching Chan y Veronika Kudermetova no fueron capaces siquiera de forzar la tercera manga (7-6/8-6 y 6-1), algo que sí ocurrió en la cita de cuartos frente a las chinas Xinyu Wang y Saisai Zheng (7-5, 3-6 y 10-5). Habían sufrido de nuevo, pero ya estaban en semifinales.

Y este viernes, en un Estadio Manolo Santana que se volcó con ellas después de despedir a Nadal y a Alcaraz en las jornadas anteriores, tumbaron a Pavlyuchenkova y Potapova (de nombre Anastasia ambas) por 6-4 y 7-6/7-1. Tuvieron que remontar un 1-3 en contra durante el segundo tramo y, además, las rusas gozaron de una bola de set, pero Sorribes y Bucsa aguantaron hasta el tiebreak, en el que se mostraron muy superiores.