Íñigo Pérez es consciente de que los deberes aún no están hecho tras la victoria del Cádiz en Sevilla. Su equipo, en cambio, fue capaz de conseguir un meritorio triunfo ante el Granada (2-1) pese a jugar en inferioridad numérica desde el minuto 5. Y esto le permite llegar a Montjuïc en una situación relativamente tranquila: necesitan sólo un punto para lograr la salvación, que también estará asegurada si los de Mauricio Pellegrino sufren algún traspiés.
Encuentro: "Enfrentarte a estos equipos estimula e ilusiona. Su potencial ofensivo es sabido por todos, pero cuando uno se expone tanto es difícil cubrir todo lo que tiene que ver con las transiciones. Ojalá no haya muchos goles. Intentaremos que sea un partido cerrado".
Inestabilidad del Barcelona: "Puede que los jugadores quieran desinhibirse de cualquier aspecto extradeportivo y tendremos que estar preparados".
Más sobre el rival: "Nunca he visto a un Barça especulativo que no busque dominarte y marcar goles, así que no espero uno distinto mañana".
Xavi Hernández: "Como jugador ha sido una referencia, especialmente para aquellos que hemos jugado en el centro del campo. Ha sido uno de los mejores. Se ve que sigue pensando de igual forma como entrenador y es capaz de transmitírselo a los futbolistas. Sobran las palabras".
Cambiar el planteamiento: "Yo tengo mi idea, pero a veces no eres capaz de plasmarla y se altera. Siempre va a ser la misma, aunque con matices. Trataremos de presionar alto y ser agresivos".
Permanencia: "No es el momento de hacer cuentas, no estamos ahora mismo para tener una sensación de falso control. O vamos siempre en nuestro máximo o es difícil. Tenemos que apretar nosotros. Si llega algún regalo, bienvenido sea. Ir a empatar... no sé cómo se hace".
"He recibido mucha ayuda"
Lecciones a sacar: "Espero que podamos hacer ya ese análisis el lunes. Ser muy fiables en Vallecas es el paso número uno".
Invicto ante los dos gigantes: "Ojalá se dé. Sería una muy buena noticia. Va a ser difícil. Mataríamos dos pájaros de un tiro porque seguiríamos con esa estadística y conseguiríamos el objetivo".
Parte médico: "A excepción de Trejo, que está sancionado, los demás están disponibles. Eso dice mucho de ellos porque a estas alturas de temporada es fácil que puedas tener algún lesionado. Todos tienen ganas".
Óscar Trejo: "Hasta hace un día todavía estaba afectado. Es normal. Él siente estos colores como nadie. Aún tenía el miedo en el cuerpo. Se ve que es inconsciente y fortuita, sin maldad. El grupo reaccionó para poder levantarlo".
Estado físico y mental: "Están bien. Los jugadores habituales están acostumbrados a entrenar fuerte y recuperar. Saben que tienen que hacer un pequeño esprint y ya luego podrán descansar y disfrutar".
Primera experiencia como técnico: "Me encuentro bien y estoy contento. He recibido mucha ayuda en un club que ya conocía, y eso ayuda mucho a la integración. Yo disfruto mucho de mi profesión, aunque hay momentos de estrés. No sufro en exceso e intento relativizar las cosas, igual que cuando era jugador".
Abdul Mumin: "Está compitiendo a un nivel muy alto. Ha conseguido adaptarse a esta liga, a las circunstancias y al no manejo del idioma. Estoy muy contento. No quiero que baje la guardia, debe persistir. No creo que haya tocado techo. Es una posición en la cual no puedes relajarte, y menos en estas dos jornadas que restan".
La plantilla anima a los que aún deben renovar: "Ya sabéis que no tengo redes sociales. No he querido hablar nada del futuro, aunque sea casi inmediato. Es una evidencia que el grupo formado es muy potente. Estoy encantado con todos".