Aunque el AMR24 fue competitivo y Fernando Alonso pudo adelantar a varios coches, la presentación de Aston Martin en el GP de Miami le ha dejado un sabor agridulce a sus aficionados. "Fue duro. Una carrera marcada por la posición de carrera, con poca degradación y trenes de DRS. Era difícil progresar incluso con un coche más rápido. Por eso decidimos variar las estrategias, a veces ganas y otras veces pierdes. Con Fernando tuvimos suerte con el coche de seguridad virtual, sus neumáticos estaban planos desde la lucha con Gasly al inicio y tenían vibraciones muy malas, temíamos que algo pudiera romperse. Limitamos los daños, pero para sumar más puntos hay que salir desde más adelante", aseguró Michael Krack, directivo de la escudería británica.

Krack destacó las "luchas" de Alonso durante la carrera. “Tuvimos buenas luchas, el ritmo estaba de vuelta y no era tan malo. Fernando dijo después del esprint que hay dos coches difíciles de adelantar, que son el Williams y el Alpine. Fue muy difícil adelantar con los trenes de DRS. Mejoramos el coche en carrera, puede que eso nos haya hecho daño en clasificación porque los cambios que introdujimos tras el esprint han ayudado en carrera”, comentó.